miércoles, 19 de noviembre de 2008

Escalofriante Conclusión

He llegado a una escalofriante conclusión:


1.- Soy el elemento decisivo en el aula.
2.- Es mi acercamiento personal lo que crea el clima.
3.- Es mi estado de ánimo lo que determina la atmósfera como facilitador.
4.- Poseo el tremendo poder de hacer la Vida de un Participante, Feliz o Miserable.
5.- Puedo ser un instrumento de tortura o de inspiración.
6.- Puedo humillar o bromear, herir o curar.
7.- En todas las situaciones es mi respuesta la que decide si una crisis, crece o decrece; ...y si una persona se humaniza o deshumaniza.

Tomado y adaptado de un texto de:
Hain Ginot.

4 comentarios:

payomocion dijo...

mmm. no cabe duda que ser profesor (hablando de un buen profesor como seguramente lo eres) es una profesio y un servicio muy noble a la sociedad... felicidades

Lss Rutas de Angelica dijo...

Así es, ciertamente es una gran labor la que hacemos, porque sin nosotros no hubieran médicos, ingenieros, abogados, contadores, etc etc etc incluyendo nuestra generación de relevo; por eso y a pesar de muchos maltratos hacia nuestra profesión debemos dar lo mejor de nosotr@s para continuar acrecentando el don del servicio.
Besitos y bendiciones, corazón.

Bego dijo...

Angélica, cuanta verdad, los profesores sois muy poderosos.
Los buenos maestros tenéis nuestro futuro en vuestras manos, nuestros hijos.
Saludos.

SANTIAGO LIBERAL dijo...

a veces es muy difícil enseñar, aunque uno sea emisor el receptor debe estar abierto a recibir, hay es donde un buen maestro demuestra que lo es.
Un abrazo